Thursday, January 27, 2011

Aspecto fisico de los Mayas

El aspecto físico que tenían los antiguos Mayas lo podemos conocer a través de 3 fuentes:
  1. Los relatos de los europeos de la época de la conquista como Fray Diego de Landa en su "Relación de las cosas de Yucatan" y las "Cartas de Relación" de Hernan Cortes.
  2. En el arte, por ejemplo, la pintura sobre los utensilios de ceramica, murales, estelas, mascaras de estuco y figurillas de barro.
  3. Los restos óseos.
Las características mas sobresalientes son la baja estatura (1.60 mts. los hombres y 1.50 mts las mujeres en promedio). La forma de la cabeza era ancha con cabello oscuro y lacio, nariz aguileña y pómulos salientes. Estas son las características que tenia este pueblo de manera natural pero también podemos encontrar las modificaciones que realizaban a los cuerpos para cumplir un carácter religioso y de estatus social.

En esas modificaciones encontramos los tatuajes, escarificaciones (cicatrices sobre la piel). La colocación de ornamentos en la nariz, labios, orejas y la frente requerían una perforación que resultaba en la extensión permanente de la piel.

Otra modificación era la deformación del cráneo la cual dejaba a la cabeza mas ancha o angosta, larga o alta. Esta practica generalmente se realizaba entre la elite gobernante. Para llevar a cabo tal deformación era necesario utilizar tablillas de madera unidas mediante bandas que se colocaban alrededor de las cabezas de los recién nacidos hasta alcanzar la forma deseada. Las parteras y las madres de los niños eran quienes hacían esta deformación.

Según Fray Diego de Landa a los cuatro o cinco días posteriores al nacimiento ponían la cabeza del infante entre dos tablillas las cuales apretaban reciamente que al cabo de algunos días le quedaba la cabeza deformada.

Es de suponer que en la mayoría de los casos no dejaba secuelas neurologicas pero gracias a las evidencias oseas, las deformaciones severas no eran simétricas y provocaban alteraciones en la forma de las órbitas, la protrusion nasal y el prognatismo alveolar.

Los mayas también modificaban la dentadura tanto de hombres como en mujeres después de la adolescencia por medio del limado y la incrustación de piedras. El limado implicaba el uso de materiales abrasivos que entraban en contacto con el esmalte y la dentina llegando en algunos casos a crear daños en la pulpa dental.

Para realizar incrustaciones de piedras como la jadeita, pirita, hematita o turquesa en los dientes, había que realizar un complejo procedimiento de perforación parcial del diente al tamaño exacto de la piedra y la fijación de esta con pegamentos especiales.

Finalmente en la época de la conquista todas las practicas de modificación física comenzaron a desaparecer.